Las estanterías push-back son idóneas cuando se trata de almacenar de forma compacta mercancías paletizadas del mismo tipo en el almacén. Al contrario de la estantería por gravedad, la carga y la retirada de las mercancías se llevan a cabo en un solo lado; de esta forma se ahorran tanto recorridos y tiempos de transporte como también espacio. Esta forma de almacenamiento dinámico se utiliza a menudo también para canales de amortiguación. Las estanterías push-back están formadas por escalas de estanterías contiguas dispuestas en fila, formando un canal. Gracias a la inclinación de las vías, la retirada del artículo es especialmente fácil, y el siguiente artículo avanza automáticamente. Durante el almacenamiento, las unidades ya almacenadas deben empujarse contra la pendiente hacia arriba. Por lo general se encuentran tres palets en una estantería, o más de manera opcional. El almacenamiento se lleva a cabo habitualmente de forma longitudinal mediante carretillas elevadoras o carretillas de brazos porteadores.
Ventajas
Las estanterías push-back son especialmente adecuadas para el almacenaje de cantidades medias de mercaderías paletizadas del mismo tipo.
Nuestras estanterías push-back están formadas por marcos de estanterías contiguas dispuestas en fila formando un canal. La inclinación de las vías es de entre el 3% y 5%. En este sistema, la carga y descarga se realiza por el mismo lado de la estantería. Si ya hay unidades de carga colocadas en uno de los canales, se ha de desplazar la unidad de carga anteriormente depositada en contra de la pendiente. Durante la descarga, los palets que ya se encuentran en el canal avanzan de manera autónoma. Lo habitual es que haya tres palets en fila por canal.